Hola hola. No sabía muy bien qué escribir en esta newsletter, especialmente calzando como sucede con el segundo aniversario de la revuelta. Más que re-enviar ciertas lecturas – como, por ejemplo, el argumento para eliminar todos los monumentos (sí, incluso los a Gabriela Mistral) u sobre la investigación del colectivo Forensic Architecture sobre el uso de gases lacrimógenos en la ex Plaza Italia– prefiero seguir compartiendo nuevas fuentes de nutrición, algunas que creo que se relacionan – de maneras más evidente, unas, quizás de formas más subterráneas, otras – con nuestro momento actual. Espero les sirva:

uno/ Daniel Matamala escribre sobre la vieja y sucia técnica de «hacerse el loco»; y Oscar Contardo sobre quién quemó el metro.
dos/ los mapeos colectivos y emancipadores del colectivo iconoclasistas.
tres/ descubrí hace unas semanas el concepto de “emergence” (emerger/germinar) y su uso en teorías que analizan cómo pasamos de «networks» a «comunidades de prácticas» a cambios radicales y súbitos (tipo estallido social, caída del Muro de Berlin, fin de la USSR). Hay palabras hermosas, como esa, que apenas las aprendemos gatillan procesos, ideas, iluminan. Aquí, un hermosísimo diagrama para vsiualizar esas ideas y, quizás, compartirlas.
cuatro/ otro tema que creo que había estado explorando de maneras más indirecta y que surgió esta semana es el de la escala. El mito de que «más grande es mejor», a lo cual algunes responden: “the logic of bigness devalues the grandmother spending all day with her granddaughter, the gardener restoring just one small corner of earth to health, the activist working to free one orca from captivity. It devalues anything that seemingly could not have much of a macrocosmic effect on the world. It devalues the feminine, the intimate, the personal, and the quiet. It devalues the very same things that global capitalism, patriarchy, and technology have devalued.”
También sobre escalar hacia el lado en vez de hacia arriba (o sobre qué hace de un lugar, ese lugar); y (via Forbes!) sobre la diferencia entre escalar lo que sirve (paradigma antiguo) y contruir algo para que funcione a la escala adecuada (nuevo paradigma, quizás?).
cinco/ apuntes constitucionales: potente entrevista a Elisa Loncón y Jaime Bassa; sobre la red de constitucionalismo ecológico (RCE); y Daniela Catrileo reflexiona sobre nuestros deseos comunes – “¿cómo no sentirse tocada por las imágenes, las lenguas, las propuestas de trastocar el mundo añejo que heredamos?”
seis/ para escuchar, excelente: sobre las estrategias, dinámicas y para quién funciona (quién gana de) la indignación/ el escándalo en redes sociales.
siete/ «we are here on earth to fart around» (sí, tiene que ver con todo lo de arriba. sí, es corto. sí, me hizo reír).
ocho/ para ver: ayer estrenó la nueva temporada de «Succession» y no puedo estar más feliz que mi serie favorita está de vuelta. También pude ver el tan recomendado documental de Netflix sobre el Reino Funghi y me sumo al coro de fans. Muches me han comentado sobre la serie del calamar. Me niego a verla. Siento que he vivido suficientes distopías para una vida entera.
nueve/ lecturas recomendadas: ayer empecé y casi terminé «All art is ecological» de Timothy Morton. Interesantísimo. También terminé «Beautiful world, where are you» de Sally Rooney; es bueno, pero me gustaron más los primeros dos. Este se siente más como una transición a algo más. Por último, las reflexiones de Camila Alegría sobre la obra de Francisca Álvarez.
diez/ después de hablar con una amiga que se ha estado sintiendo desesperanzada con el rumbo del país, pensé que vale la pena volver a compartir esta lectura sobre la diferencia importantísima entre identificar el veneno y buscar la nutrición.
Gracias a todes por leer. Esta newsletter es gratis pero no barata. Para apoyar, compártela con alguien que conozcas, o suscríbete (el botón está al pie de la página). Y como siempre, un poema nunca está de más:
«Érase un bosque de palabras,
una emboscada lluvia de palabras,
una vociferante o tácita
convención de palabras,
un musgo delicioso susurrante,
un estrépito tenue, un oral arcoíris
de posibles oh leves leves disidencias leves,
érase el pro y el contra,
el sí y el no,
multiplicados árboles
con voz en cada una de sus hojas.
Ya nunca más, diríase,
el silencio.»
«Reunión», Ida Vitale.